viernes, 10 de septiembre de 2010

NAUFRAGO

Era único superviviente de un naufragio. La isla era diminuta y estaba deshabitada. Como era hombre de fe rogaba todos los días a Dios y le pedía ser rescatado, Así también, cada día escudriñaba el horizonte en busca de una ayuda que parecía no llegar nunca.
Cansado al fin, decidió construirse una cabaña para protegerse de los elementos y almacenar allí sus pocas pertenencias.

Pasó el tiempo y, ocurrió que, un díaque venía cansado de merodedear por la isla en busca de alimento, encontró su cabaña envuelta en las llamas de un incendio… El hombre corrió para rescatar lo que pudiera pero cuando llegó estaba todo consumido y el humo ascendiendo hasta el cielo.

Anonadado por la catastrofe, de nuevo elevó su queja a Dios. No podía ser más desgraciado. Lo había perdido todo… Luego a la tristeza siguió la rabia. ¿Cómo Dios podía ser tan cruel que –despues de tanta petición al cielo en busca auxilio- le dejara tan desamparado?
Tras las lágrimas vino el sueño, pues estaba agotado.

Al día siguiente, le despertó el sonido de un barco que se acercaba a la isla. Había venido a rescatarlo…
- ¿Cómo dieron conmigo? ¿Cómo supieron que estaba aquí?
- Sencillamente vimos la señal de humo.

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